Volver a casa, y que un gato te mire, y te haga escribir.

-Ese gato no es normal. - Drew se sentía intimidado por la mirada de aquel felino, era algo extraño que le resultaba inquietántemente familiar, no era una mirada animal, era más bien... humana. Pero tampoco era una mirada humana cualquiera, sabía que la había visto antes, y sabía perfectamente donde, pero era imposible. Jane no estaba más con él, ni con nadie. Jane le había dejado, junto al resto del mundo de los vivos para siempre, hacía exactamente 3 meses y 26 días. Había llevado la cuenta desde aquel fatídico accidente de tráfico, que acabo con su vida cuando colisionó con aquel árbol intentando esquivar aquel... gato.

-¿Eres tú?- Drew se acercó al animal, sin pensar muy bien lo que estaba haciendo.

Asustado por la repentina voz de aquella figura, que tanto tiempo había permanecido inmóvil, pensando en algo que se escapaba a su conocimiento, el gato dio un respingo antes de alejarse a toda velocidad del cubo de basura en el que estaba buscando algo que llevare a la boca.

-¿Se puede saber qué estoy haciendo? Es un puto gato, nada más. -

Pero Drew estaba seguro de que esa mirada, SU mirada, le había observado desde aquellas rasgadas pupilas situadas en esos brillantes ojos amarillos. ¿Podría haber ocurrido? ¿Podría la pérdida de Jane haberle hecho perder la cabeza del todo? Al fin y al cabo, estaba hablando solo. Bueno, solo no, estaba hablando con un gato callejero que rebuscaba en la basura porque su forma de mirar le había recordad a ella. Pero después de haber observado esos ojos, no podía irse sin más, así que a riesgo de perderse a si mismo en el camino, Drew comenzó a seguir a aquel ágil felino por callejones estrechos. Callejones extraños, y familiares al mismo tiempo. Callejones que le llevaban a un lugar que el desconocía, pero que le invitaba a acercarse.

Y ahí estaba aquel gato, al final de un callejón, entre tres paredes y un par de cajas de frutas que debían actuar como cama. Lo que sucedió al instante siguiente, fue mágico, asombroso, pero, de algún modo, esperado. Ese pequeño mamífero, se retorció unos segundos en la sombra, antes de transformarse delante de los ojos de Drew, en aquella chica que el siempre había amado, desde que se conocieron en aquel parque cuando tenían 7 años. Esto no tenía sentido en el mundo real, pero él sabía que no se había vuelto loco, que ella estaba ahí, con él, y nunca la dejaría escapar otra vez. Jane abrió la boca, interrumpiendo sus pensamientos.

-No tengo mucho tiempo.
-¿Qué? No, no voy a dejarte escapar.
-No quiero que lo hagas, pero tampoco quiero ser egoísta.
-No se que quieres decir Jane.
-Nadie vuelve del mundo de los muertos para siempre Drew, pero podemos existir juntos, en otro tiempo, en otro lugar, juntos para siempre... a cambio de tu vida.
-¿Mi vida? Mi vida siempre ha sido tuya desde la primera vez que posaste tus ojos amarillos en mi, sin ti, no tiene sentido, sin ti, no tengo vida.

Sin necesidad de decir nada más, los dos amantes se fundieron en un beso, que sellaría su amor, a un precio que a ellos, no les parecía tan alto, si la recompensa era la eternidad juntos, como ellos siempre desearon.



(Es que un gato me ha mirado raro volviendo a casa, y os lo juro, me ha tocado alguna neurona, me ha dado mal rollete ese gato, pero me ha inspirado. Que majo.)

10 comentarios:

  1. Os ha dado a todos por escribir microrelatos. La pera, chaval.

    Ahora tienes que continuar con lo que ocurre años después, cuando el pavo se cansa de la gatuna y quiere el divorcio.

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  2. ¿Esto es autobiográfico? ¿Sacarán una peli?

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  3. Eeeh! Mola... : )
    Había pasado antes por este blog, pero no suelo comentar en ninguno la verdad, y el mío es un adornillo. Bueno, la cosa es que me he animao porque tengo la sensación de que la mirada de mi gato es una mirada humana cada mañana al despertar, oh dios! Me ha gustado verme ahí, oye.

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  4. @Charles Lo mismo que tú señor, raro, pero molas.
    @Aitor: No tío, que no hicieron separación de bienes y claro, a ver quien se queda el wishkas.
    @Aída: Si, yo oy el gato, y ya te he dicho que tu puedes ser la productora.
    @Samaku: Aah.
    @Gu geu: No sabes la ilusión que me hace que gente a la que no conozco de nada se pase y comente. Me alegro de que te haya gustado :)

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  5. Eso, la pera, tío. Y eso que vuelvo de tomarme unos potes. Me parece asombroso y estupléndido (esta mierda es muy buena tío!!! xD). Ahora en serio... cada día me sorprende más los talentos que descubro en los bloggers... los blogs se tienen para algo, es cierto, pero no suele estar unido a un especial talento para escribir, y he de decir que el microrelato... te has salido, eh? me ha encantado... mucho.

    Y ahora dejo de escribir porque no hago más que darle a la tecla de corregir, ya se sabe esto de tener unas cervecillas encima...

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  6. :)

    Siempre viene bien un buen texto que digerir.

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  7. Pues me ha gustado mucho, canijo... Me has sorprendido :)

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  8. Recien he llegado a los dominios de blogger y ahora mismo estoy en un proceso de búsqueda de blogs que me gusten.
    Definitivamente, el tuyo me encanta.
    Por cierto, el escrito esta rebueno, y lo de los vampiros (aunque ya sea de hace tiempo) también, lo he deborado con gran pasión.
    Nos "vemos" :)

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